No conozco mejor organización piramidal que la instituida por Jesús de Nazaret. Ignoro si, anteriormente, algún personaje histórico intentó algo parecido. No me consta. De hecho, lo que vino después, el cristianismo, supuso una auténtica revolución social. La evidencia de ello es que los poderes tradicionales, en primer lugar acabaron con Jesús y, posteriormente, intentaron acabar con su legado.
Todo parte de la palabra prójimo. Esta palabra proviene del latín, proximus (más cercano). La idea de Jesús consistió en que, si amamos a las personas que tenemos cerca, y éstas, a su vez, a sus próximos y, así, sucesivamente, se crea una red de relaciones entre todas las personas del mundo, basadas en el amor de unos a otros.
Es una alternativa evidente a la que, desde el neolítico, en el que los seres humanos descubrimos el excedente, hemos utilizado a lo largo de la Historia: el poder mediante la acumulación de riqueza y el establecimiento de relaciones interpersonales basadas en ese poder.
Jesús quiso acabar con ese “status quo” adivinando que esa forma de organizarse no conducía al hombre a su plenitud ni a su felicidad.
Influido, parece ser, por los filósofos griegos, Jesús intentaba que alcanzásemos la felicidad a través de la virtud y concibió que la virtud, sobre todas las virtudes, era el amor.
Claro que, mediante esta forma de vivir, se rompería con instituciones tan arraigadas en nuestras culturas como el mercado, la relación gobernante-gobernado, los axiomas de la actual teoría económica, etc…
Es un auténtico reto, una manera diferente de concebir la sociedad.
No sé, si en lugar de haberse adaptado el cristianismo a las instituciones preestablecidas, se hubiese implementado como Jesús lo concibió, la humanidad tendría su actual desarrollo. Es algo que me resulta imposible de adivinar. Pero me gustaría que personas más sabias e instruidas que yo, fuesen capaces de establecer un escenario de lo que hubiese sucedido.
De lo que sí estoy convencido, es que la red virtuosa que estableció Jesús, hubiese librado a la humanidad de muchos de sus problemas.